La carne de pollo es un alimento muy versátil y se puede cocinar con una infinidad de ingredientes. Además al tratarse un tipo de carne blanca con bajo contenido calórico hace que podamos disfrutarla en cualquier comida.
Esta manera de cocinar las pechugas de pollo es muy sencilla y llena de sabor combinando la sutil acidez del limón, el dulzor de la miel y el aroma del tomillo.
Se preparar en poco tiempo con un resultado espectacular y acompañada de una guarnición de arroz blanco la salsa tomará protagonismo.
Ingredientes: 4 personas- 4 pechugas de pollo deshuesadas y sin piel
- Zumo de 1⁄2 limón, guardar unas rodajas
- Sal y pimienta molida
- Aceite de oliva
- 1 c.s de mantequilla
- 1 ajo picado
- 1⁄2 taza de caldo de pollo
- 3 c.s de miel
- 1 c.p de mostaza suave
- Ramitas de tomillo
- Con ayuda de un mazo aplastar la parte más gruesa de las pechugas para que queden más uniformes y se cocinen mejor. Salpimentar ambos lados de las pechugas y rociar con el zumo de limón.
- Calentar un poco de aceite en la sartén Unica a fuego medio, añadir las pechugas y dorar por ambos lados hasta que estén bien doradas, aproximadamente unos 5-6 minutos por lado.
- Reservar el pollo en un plato y añadir a la sartén la mantequilla, dejar que se funda y apartar del fuego. Incorporar el ajo picado y las ramitas de tomillo para que la mantequilla coja sabor y el ajo y tomillo no se quemen.
- Poner de nuevo la sartén en el fuego e incorporar el caldo, la mostaza y la miel.
- Mezclar los ingredientes y reducir la salsa unos minutos. Devolver el pollo a la sartén y cocinar 5 minutos más salseando las pechugas.
- Servir con arroz blanco.
Dejar un comentario
Este sitio está protegido por hCaptcha y se aplican la Política de privacidad de hCaptcha y los Términos del servicio.